La construcción al servicio de la salud

En una época marcada por un problema de salud mundial, como es la pandemia por COVID-19, ha quedado claro que, hoy más que nunca, es necesario reforzar el sector de salubridad en todos sus aspectos, siendo uno de ellos el de la infraestructura.

Los hospitales y centros de salud son edificaciones complejas en las que influyen muchos factores para su mejor desempeño. Recordemos que la vida y salud de miles de personas están en juego dentro de estos edificios, por lo que es necesario considerar múltiples aspectos como dimensiones, higiene en las superficies, distribución de espacios para personal y maquinaria especializada, ya que el tránsito de gente es interminable.

En adición, los nuevos tiempos requieren construcciones sanitarias alineadas con la sustentabilidad y el avance en la tecnología médica. Hoy, una institución de salud debe subsistir en el tiempo, es decir que sus instalaciones y posibilidades de atención no se degraden rápidamente, manteniendo su oferta de servicios con la misma calidad a través de los años. 

Así mismo, por cuestiones de salud y preservación, el entorno no se debe contaminar ni hay que afectar al medio ambiente. La eliminación de residuos debe realizarse cumpliendo los resguardos ecológicos y legales pertinentes. 

 

 

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¿Cómo favorece un ambiente óptimo a los hospitales?

La construcción sostenible tiene una serie de factores que la convierten en el mejor modelo de edificación, ya que contribuye con el fomento de la salud y la productividad a través de elementos como: 

  • Espacios ventilados que permitan menor concentración de CO2 brindan mayor calidad en el aire. De acuerdo con el estudio Salud, bienestar y productividad en oficinas del World Green Building Council, la ventilación puede mejorar aspectos como la productividad entre 8 y 11%. Tomando en cuenta que un hospital está en funcionamiento todo el día, es imprescindible contar con entrada y salida constante de aire. 

  • Entornos con mayor tranquilidad. Ciertos espacios hospitalarios (como quirófanos o habitaciones para pacientes) requieren la cancelación total de ruido; por ello, es importante el uso de materiales ecológicos dirigidos a la insonorización.

  • Entrada de luz natural. Para los pacientes es importante tener conexión visual con el entorno externo. La transmisión de luz recomendada hacia las ventanas de un hospital es del 20 al 30%, con un factor solar de 0,2, lo que brinda un espacio de recuperación más cómodo. 

¿Cómo conjuntar estos elementos con el fin de hacer los hospitales más funcionales y duraderos para el futuro? Estos son algunos aspectos importantes para considerar en la construcción y mejoramiento de los centros de salud modernos: 

Pisos. Los pisos en hospitales deben soportar un tráfico que dura todo el día por parte de usuarios y maquinaria, por eso deben ser durables y homogéneos, además de ofrecer óptimas cualidades de resistencia frente a elementos como temperatura, electricidad, fuego, y otros factores que puedan provocar desgaste.

Muros. Estas superficies deben asegurar la higiene y asepsia del lugar, enfocándose en áreas como laboratorios, pabellones y salas de imagen. Además, deben tener una alta resistencia a los químicos. 

En los hospitales es importante evitar los espacios entre muros, ya que ahí podrían originarse infecciones o desarrollarse bacterias; para esto se puede utilizar Novelio Mold-X, recubrimiento de pared fabricado con telas de alto rendimiento tejidas a partir de hilos de vidrio, que contiene un agente activo antibacterial que contribuye al cuidado de la salud, evitando la formación de moho y hongos. 

Acústica. El sonido es un tema relevante en las construcciones para la salud: cuando es excesivo, puede causarnos dolores de cabeza, hipertensión e irritabilidad. Eso en condiciones normales, como oficinas u hogares; ahora, imagina lo que causaría en un hospital.

Por ello, existen áreas que deben estar completamente selladas ante el ruido, como quirófanos y algunas salas donde el exceso de sonido resulta perjudicial. Las construcciones deben estar asentadas con materiales aislantes de este tipo de contaminación. Los aislamientos acústicos de Fiberglass Isover de Saint-Gobain son una solución a problemas como el ruido y altas temperaturas. 

Cabe destacar que diversos estudios han demostrado que un buen ambiente de sonido en las unidades de cuidados intensivos (UCI) coronarios ayuda a reducir  el  pulso de los pacientes, los reingresos hospitalarios y la necesidad de medicamentos adicionales.

Calidad del aire. El aire del entorno hospitalario tiene que ser completamente respirable. Hay muchas partículas viajando por el aire al interior de un centro de salud, las cuales pueden causar enfermedades. Para reducir la presencia de microorganismos y tener un aire más puro para todos los que se encuentran en un hospital, son necesarios materiales de gran absorción, por ejemplo, el revestimiento de pared Novelio Clean Air, que ayuda a mejorar la calidad del aire en interiores, logrando absorber hasta el 70% de los compuestos volátiles orgánicos liberados por el uso de productos de limpieza y partículas del mobiliario médico.

 

 

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Soluciones integrales en la construcción hospitalaria

Desde siempre, la construcción sustentable al servicio de la salud humana ha estado presente por medio de las soluciones Saint-Gobain, probadas a través del tiempo, las cuales ostentan seguridad y cumplimiento de los estándares más exigentes de calidad.

Nuestra gama de soluciones ayudan a mejorar la calidad del aire, a crear espacios más confortables en términos de acústica y temperatura, y a distribuir la luz natural, influyendo en la recuperación rápida de los pacientes.

Además, el grupo ha extendido su oferta para la industria de la salud a más que sólo materiales para construcción de hospitales. Al día de hoy, los plásticos de alto desempeño participan de forma importante en el desarrollo de soluciones para el cuidado de la salud y el bienestar de las personas, mediante bolsas, cánulas, etc.